El Dos de oros: El eterno malabarista

El Dos de Oros del Rider-Waite siempre me ha llamado la atención. Por su jovialidad y su imagen juguetona y alegre.

El Dos de oros: El eterno malabarista 

Un joven malabarista maneja con gracia y habilidad dos pentáculos, pese a que están enlazados con el símbolo del infinito, también llamado lemniscata, que parece resaltar la dificultad de la tarea. Al fondo, un mar picado sacude a dos barcos, representando los altibajos y problemas de la vida, pero este joven parece feliz y despreocupado, ignorando las dificultades, capaz de manejar lo que le echen y con una capacidad tan infinita como el símbolo que tiene en las manos.

Significados del Dos de oros

Los significados del Dos de oros son: 

• Significado en posición normal: Habilidad, facilidad para resolver problemas. Disfrute de la vida y capacidad para sortear dificultades. Persona multitarea, capaz de llevar a cabo muchas cosas a la vez. Habilidad para los negocios.
• Significado en posición invertida: Desorganización, incapacidad para manejarse. Querer hacer demasiadas cosas a la vez. Malas noticias a nivel económico, despilfarro de dinero. Estancamiento, problema que parece insalvable.

Para los tarotistas esta carta representa la posibilidad de mantener el equilibrio de una situación siempre y cuando se sea capaz de mantener la flexibilidad y adaptarse a los grandes cambios, inherentes al hecho de estar vivos. No obstante, debe tenerse en cuenta, siempre, que el optimismo es un buen compañero, pero que no debe nunca pecar de exceso de confianza, pues este sentimiento puede hacer que no veamos bien las oportunidades o peligros que vamos atravesando.

Significado de Dos de Oros

En líneas generales, esta carta habla de buenos resultados en las distintas áreas de la vida, siempre y cuando se sepa mantener el equilibrio suficiente para solucionar con calma y adecuadamente los problemas que vayan surgiendo a medida que avanzamos. En cuanto a los planos específicos de la existencia, también cuenta con significados específicos. Por ejemplo, en el área laboral la presencia del Dos de Oros indica que vienen momentos de cambio tanto en la oficina como en la carrera, no obstante los cambios pueden ser positivos, por lo que esta carta viene a advertirle al consultante la necesidad de mantener el equilibrio. Así mismo, recuerda la importancia de no llenarse de obligaciones, sino ir sorteando los inconvenientes que sobrevienen, sin que estos se traduzcan en problemas de salud, por acumulación de estrés.

Si, por el contrario, la persona se encuentra desempleada, es necesario que propicie la obtención de un trabajo, pues puede estar sintiendo que si hasta ahora ha podido mantenerse sin un sueldo podrá seguir haciéndolo así. No obstante, esta carta también indica una actitud de ingenuidad, en el que la persona cree que puede mantener por mucho tiempo una situación, sin darse cuenta realmente de las desastrosas implicaciones que puede traer el no tener una estabilidad laboral.

En cuanto al plano amoroso, esta carta advierte sobre la importancia de mantener una comunicación adecuada. Así mismo recuerda lo difícil e ingenuo que resulta la creencia de poder manejar varias relaciones a la vez, por lo que se le aconseja al consultante que se decida por una, y deje fluir las otras, pues esta situación no se podrá mantener hasta el infinito. Si, por el contrario, la persona que cuestión acaba de terminar una relación, el Dos de Oro aparece en una consulta para recordar que lo que a veces vemos cómo un final es simplemente el comienzo de nuevas oportunidades, por lo que es mejor ver hacia adelante, que seguir añorando un pasado que no ha de volver, por el propio beneficio de quien pregunta.

COMBINACIONES

Dos de Oros + El Carro: falta financiación más sólida para iniciar un nuevo proyecto. Aconsejable no comprar un coche.


Dos de Oros + Los Enamorados: para optar bien, hay que tener un juicio ponderado y equilibrado que nos permita obtener el mejor acuerdo posible.


Dos de Oros + La Suma Sacerdotisa: es necesario evolucionar y aprender más en el camino espiritual para que la vida material mejore; mientras eso no se haga, continuará el estancamiento.